“El lunes 17 de noviembre se cayó parte del techo de primer grado y recién el jueves vino gente de infraestructura escolar del gobierno porteño pero sólo a sacar fotos; recién este martes, es decir ocho días después, vinieron a picar para ver si había algo mas que podía caerse”, dijo Liliana, madre de un alumno, en las puertas de la institución ubicada en Joaquín González y Bacacay.

“Ese día -continuó- tuvimos que sacar nosotros a los nenes por miedo que se caigan más pedazos del techo”, y denunció que personal de “infraestructura escolar clausuró el aula de segundo grado porque hay peligro de desmoronamiento de ese techo también”.

“Los nenes de segundo grado están girando por la escuela y buscan dónde hay un lugarcito, van a estudiar ahí, es una vergüenza”, profundizó.

La mujer, que además es integrante de la Cooperadora de Madres del colegio, aseguró que ya “se presentaron muchísimas notas” en la que se denuncian las condiciones del establecimiento así como también “hay denuncias en el ministerio de Educación desde 2010”.

Y denunció que “en esta comuna hay ocho escuelas más que no están en condiciones para dar clases. Esto forma parte de un plan sistemático donde el gobierno de la ciudad muestra por afuera una escuela hermosa, pintadita, derechita y por adentro la escuela se cae a pedazos”.

DZ/sc

Fuente Télam