El personal del Hospital Rivadavia levanta una carpa en las puertas del establecimiento (av. Las Heras 2600) en reclamo por el estado de abandono en el que se encuentra ese centro médico.

Denuncian la falta de gas, habitaciones inundadas y que no se están entregando turnos. Reclaman además que se liquiden correctamente los haberes, el cobro del 82 por ciento móvil y el pase a planta permanente de los contratados.

Más de 17 mil firmas solidarias juntaron hasta ahora los empleados del Hospital Rivadavia con el apoyo de la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA) y la Asociación Trabajadores del Estado (ATE).

«La carpa está para que se vea que realmente no están haciendo nada por el hospital, que la gente tome conciencia que es un hospital público, que está al servicio de la comunidad, que el personal que está acá, está al servicio de la comunidad», aclara José María Guerault, electricista de guardia, quien lleva 27 años trabajando para el hospital, y los últimos 17, ha estado a cargo del mantenimiento total del Hospital Rivadavia.

Los empleados aclaran que los departamentos de Estadística, el quirófano central, la sala de cirugía, Endocrinología, Urología y Traumatología ya han dejado de funcionar, algunos de ellos han sido desmantelados por completo. Actualmente, sólo la guardia, Clínica Médica, Obstetricia, Pediatría, Neonatología, Partos y Cardiología están prestando servicios, pero en la mayoría de estos sectores no hay suministro de gas, uno de los sectores más complicados es la cocina, que funciona a través de abastecimientos externos.

«Teníamos ocho quirófanos operativos, viejitos, pero operativos. Vino una empresa a repararlos a nuevo y los destruyeron y no funcionan más. En otro piso, había cuatro salas que estaban en condiciones y las destruyeron. Endocrinología y Oftalmología estaban abajo y también desaparecieron, o sea, que un pabellón ya lo anularon. Hace aproximadamente cinco meses se incendió la farmacia, ahora no está más. Se rompió un caño cloacal que da al departamento de Estadísticas y tampoco se repara. Están rotos los aire acondicionados y la calefacción. Hace un año que estamos sin gas«, denuncia Guerault.

Lo que llevó a los empleados a esta medida de protesta es porque según manifiestan se está trabajando con insumos de baja calidad y destacan que no se atienden ya en el hospital una importante cantidad de pacientes por falta de camas y recursos técnicos.

Hoy se abrirán los pliegos de licitación, y para el 27 de mayo próximo deberían comenzar las obras de reconstrucción y mantenimiento en el hospital, sucedido esto, los empleados levantarían la carpa y terminarían con la medida de protesta. Pero exigen que las obras tengan una supervisión con personal idóneo, acompañada con empleados del lugar, porque tal como denuncian, cada vez que se inició una obra de mantenimiento, o se destruyó lo que se intentaba arreglar o se desmanteló. «Esas obras las licitan, se hace el trabajo, y terminan anulándose al otro mes. Repararon los ascensores, estaban bárbaros, automáticos, te hablan, todo. Hoy ya tenemos siete que no funcionan, hay uno que lo han desmantelado», confirma Guerault, quien está al frente de la protesta.

Fuente Redacción Z