Usar lencería erótica suma estímulos, nos hace sentir más bellas y deseadas, ¡y hay muchos estilos para explorar y jugar!
Babydoll
Para que ellos nos puedan acariciar mejor… lo ideal es, cuando vamos a tener un encuentro amoroso, no usar los que tienen corpiños armados, duros. Por dos razones: entre las lolas y él hay tanta distancia, que ellos no sienten nada. Y nosotras tampoco. Cuando sacan las lolas del corpiño para acariciarlas, quedan espantosas (efecto “cuatritetas”). Si lo dejamos puesto, en el fragor de la batalla se sube y divide a la lola por la mitad… ¡un espanto! Usemos corpiños o babydolls de telas suaves, acariciables… Pueden ser con aro, ¡pero sin relleno! Dejemos los armados para lucir los vestidos. Si tuvo más de cuatro veces sexo con nosotras… ¡ya nos vio y sabe como somos!
Camisa de hombre
Un clásico que funciona, siempre y cuando sea un par de talles más grande. Ideal usarla para levantarte de la cama y traerle el desayuno. Demuestra pertenencia, tapa las zonas conflictivas… ¡y es muy sexy!
Portaligas
Quedan preciosos y parecen sencillos de usar, ¡pero tienen sus secretitos! Compralos por talle, porque a menos que seas muy flaca y estés “photoshopeada”, es bastante probable que si es talle único te “haga defecto” y te sientas incómoda.
Las medias correctas son las que no tienen siliconas, para que parezcan antiguas. También tenés que elegirlas por talle. Las tiras de atrás tienen que ser más largas que las de adelante, para que no se claven en el trasero cuando estás en cuatro patas. La bombacha se pone encima del portaligas. Así, cuando querés, te la sacás y seguís con todo lo demás puesto.
¡Y no te olvides! Se arma antes de ponértelo… ¡y no te saques los tacos!
Tacos/botas altas
Dejate los zapatos puestos para tener sexo. Se les llama zapatos de “tengamos sexo por favor”. Se compran en cualquier zapatería.
Tienen dos centímetros más de taco que los que usás habitualmente (a menos que vivas montada en 10 cm todos los días… en ese caso está perfecto así!).
Lo importante es que sean de taco fino y punta fina. Pueden ser botas o sandalias. Cuanto más finitas son las tiras que sostienen el pie, más sexy quedan.
¿Por qué los vas a usar? Porque el trasero se levanta, las piernas se alargan y la celulitis se disimula. ¡Nos paramos distinto ante la vida cuando tenemos tacos!
Cuando te los dejás puestos estás más incómoda, eso es cierto, por eso también te vuelve más femenina y delicada en tus movimientos… ¡y quedás supergata!
Venda para los ojos
Para juegos de estimulación sensorial… aumenta la sensibilidad de los otros sentidos.
Camisón inocente
Sí, a veces la femme fatal se transforma en una dulce y delicada mujercita inexperta, que quiere probar las mieles del amor… y tiene que estar acompañado con una actitud pudorosa y picarona.
Disfraces
A la mayoría de los hombres les gusta que nos disfracemos, y a muchas de nosotras nos atrae la idea… ¡pero tal vez no sabemos cómo ni qué hacer después!
Es un maravilloso juego de roles que te permite dejar de ser vos misma y ponerte en la piel de otra persona. Si él también se entusiasma con esta idea de ser otro y pasarla bien, mucho mejor aún.
Unos días la iniciativa será tuya y ocuparás el rol principal y otros días podrás dejarte llevar por fantasías de tu pareja.
¡Pero es un mundo que definitivamente vale la pena descubrir!
Algunos personajes son los clásicos: la mucamita, la secretaria, la colegiala, la enfermera, la dómina… y otros, son menos comunes: la sirenita, la mujer maravilla, la indiecita, la camarera, la corsaria… Pero lo más importante es creerte el rol, vivir la fantasía ¡y calentarte!
Ropa de látex, vinilo o cuero
Porque a veces somos… ¡malas, malas, malas! Y ciertos atuendos nos predisponen claramente a tomar las riendas de la situación… o a dejarnos llevar por las órdenes de nuestra pareja…
Sólo una corbata, boxer y tacos
Un cambio de roles sutil, muy fácil… ¡y sumamente excitante!
¡Animate y disfrutá de la mirada de tu pareja! 

Fuente Especial para Diario Z