Luego de tres años de separación, Cuentos Borgeanos vuelve a los escenarios mientras sigue trabajando en Postales, el disco que saldrá a la venta en mayo. Abril Sosa, líder de la banda y ex baterista de Catupecu Machu, se entusiasma con el nuevo material, del que adelantarán algunos temas. “Está quedando con una calidad de audio tremenda. Lo grabamos acá en la Argentina pero lo mezclamos en Los Ángeles, en el estudio de Santaolalla. Fue un disco donde todo se pensó mucho; en algunos temas llegué a grabar las voces hasta cuatro veces.”
¿Te declarás conforme con el resultado entonces?
Yo creo que uno se maneja en la dualidad: siempre está conforme y siempre está inconforme. Uno siente que hizo lo mejor y que las canciones te conmueven y también está el látigo que te dice que siempre puede mejorar. Yo creo que ése es el motor por el cual uno sigue haciendo discos, porque si todo fuera perfecto no tendría sentido seguir.
¿Por qué decidieron separase en 2010?
Las relaciones en las bandas son como las relaciones de pareja. Uno comparte mucho tiempo, muchas cosas, y llegamos a un momento de saturación donde habíamos decidido parar. Luego de ese tiempo nos juntamos y hubo como un romance de nuevo. Así que terminamos entrando en la sala de grabación y salió lo que es hoy Postales. En esta nueva etapa volvemos a estar los integrantes originales, con Diego López y Lucho Hernández, aunque sin el bajista Agustín Rocino.
¿Cómo los encontró el regreso de la banda?
La separación nos sirvió de una manera casi obligada a encarar proyectos personales cada uno por su lado y creo que volvimos ahora con todas esas nuevas experiencias. Como si fuéramos los mismos pero con una nueva carga emocional y artística, quizás un poco más grandes. En el primer disco teníamos todos veinte años y ahora estamos en los treintas. Así que ahora al momento de grabar o de componer hay cierta madurez que es interesante.
¿Seguís considerando que son una banda existencialista?
Sí. Sobre todo porque en nuestras letras tocamos temáticas que tienen que ver con la existencia y con la vida, con cosas que consideramos profundas como el amor, la muerte, la felicidad, la tristeza. Quizás este disco tiene una nueva vuelta de tuerca con más nombres propios, o historias en primera persona.
Cuentos Borgeanos 26 de abril, a las 21, en Niceto Club (Niceto Vega 5510). Entradas anticipadas: $70.
DZ/rg
Fuente Redacción Z
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