Ester Oropeza había desparecido el vienes pasado cuando volvía del colegio a su casa, situada en la manzana 7 de la villa 1-11-14, en el bajo Flores, y su madre Teodora había radicado la denuncia ese mismo día a la noche en la comisaría.
«Estábamos hoy con los vecinos, organizaciones y amigos de mi hija cortando la calle para reclamar por su aparición, cuando fue la policía a buscarme, me llevaron a la comisaria 34 y ahí me dieron la sorpresa de que mi hija estaba bien», dijo a Télam la mujer.
Los familiares, junto a organizaciones sociales y de derechos humanos, y amigos de la menor habían cortado este mediodía la esquina de avenida Carabobo y José Bonifacio.
«Aún estamos en las diligencias policiales, tratando de saber que pasó. Por ahora lo importante es que mi hija está bien y está conmigo nuevamente», dijo la madre.
La desaparición de Ester generó movilizaciones de vecinos y de organizaciones sociales ante el temor de que sea una nueva víctima de trata de personas, por lo que iniciaron una campaña de visibilización y denuncia pública.
En este aspecto, los vecinos destacaron que el caso de Ester «es el tercer caso de desaparición de una joven en un mes y medio en la villa».
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